Muchas personas piensan que vender una casa es tan simple como colocar un anuncio o un cartel en el patio delantero, luego llueven las ofertas y cierras el trato. Ojalá fuera tan sencillo.
Prepárate con suficiente tiempo
El tiempo promedio para negociar una casa es de 6 meses, aunque depende de muchos factores como el estado de la propiedad, la ubicación de la misma, la situación del mercado inmobiliario, entre otros.
Tanto la preparación de la casa, como el proceso de venta, toman algunos meses, por lo que lo ideal es comenzar a planear con suficiente tiempo de antelación.
Infórmate sobre el proceso
Entender los pasos del trámite es fundamental para saber qué esperar y así poder mantener el impulso necesario hasta el final.
Algunas personas optan por vender su casa a través de un agente de bienes raíces. Si escoges hacerlo así, lo primero es encontrar un corredor inmobiliario que conozca el área y el mercado. Si, por el contrario, decides venderla por ti mismo, es aún más importante que seas consciente del paso a paso porque te encargas de todo el trámite.
Ambas opciones tienen sus ventajas y desventajas. Sin embargo, debes tomar en cuenta que los datos de un estudio muestran que las ventas con agente tienen precios más altos y llevan menos tiempo.
Sea cual sea tu decisión, la información será tu mejor aliado.
Haz pequeñas mejoras que agreguen valor
Muchos, cuando venden sus casas, dudan en hacerle arreglos. Piensan que los compradores querrán personalizarla y, además, también quieren ahorrar. Pero la realidad es que los compradores generalmente buscan una casa lista para mudarse. Mientras menos asuntos haya que resolver en la propiedad es mejor para ellos.
Antes de gastar mucho dinero en costosas renovaciones, asegúrate de que los cambios que harás tienen un efecto directo en el valor de la propiedad.
A continuación, veremos algunas cosas que puedes hacer para mejorar el precio de tu casa, sin gastar demasiado:
Limpia y ordena
Una limpieza detallada y profunda de cada centímetro cuadrado de la casa es algo fácil de lograr y no implica un gasto muy grande, aunque decidas contratar una limpieza profesional.
Agrega una capa de pintura
Cualquier casa se verá limpia y fresca con una buena capa de pintura. Solo recuerda que debes usar tonos neutros como el blanco, el gris o el beige. De esta forma lograrás que más personas se sientan atraídas por la casa y podrán imaginarse viviendo en ella.
Si tienes suficiente tiempo y algo de experiencia podrías hacer tú mismo este trabajo, pero siempre puedes contratar un profesional.
Trabaja en el exterior
Ya que «la primera impresión es la que cuenta», es crucial que el exterior de la casa esté en excelente estado. Eso lo logras lavando las ventanas, limpiando los patios, cortando el césped o sembrando algunas plantas nuevas. También podrías reemplazar la puerta de entrada para una primera impresión aún más poderosa.
Actualiza tu cocina y tu baño
Una remodelación completa de la cocina y el baño es costosa, pero puedes hacer pequeños cambios como pintar los armarios, colocar nuevos herrajes, lámparas y espejos. Esas modestas modificaciones pueden darle un aire de renovación a tu casa.
Prepara la casa para las fotos y las visitas
Si quieres atraer a los posibles compradores y obtener el mejor precio, es necesario que prepares tu casa tanto para las fotos que publicarás, como para las visitas que recibirá.
Como parte de la preparación de la casa es muy importante organizar los espacios (incluidos los armarios) y retirar los objetos personales como fotografías o recuerdos.
Existen empresas que realizan esta preparación de forma profesional, incluyendo muebles y puesta en escena. Es una inversión que vale la pena considerar porque las casas que se muestran preparadas se venden mejor y más rápido.
Después de prepararla, no olvides tomar unas buenas fotos que muestren la casa desde sus mejores ángulos. Recuerda que también puedes pagar a un fotógrafo calificado. Estas fotos serán muy valiosas para publicar la casa y así atraer a los compradores.
Haz una valoración realista de tu casa
Sobrevalorar una casa es uno de los problemas más comunes que dificultan la venta. Un precio muy alto hará que el comienzo del proceso sea lento, y a la larga tendrás que bajarlo. No se trata de regalar tu propiedad, sino de establecer un precio competitivo.
Para hacer una valoración razonable de la casa necesitas entender el mercado local, saber en cuánto se han vendido casas similares en el mismo sector. Esa referencia es un buen punto de partida.
También debes considerar los metros cuadrados y características de la propiedad, como el número de habitaciones y baños, además de la estructura en general.
Si has decidido contratar un agente, él hará esta valoración por ti. Sin embargo, debes cuidar que haga una valuación apropiada, ya que podrían inflar el precio para tener una comisión mayor y eso sería perjudicial.
Publica tu casa
Con unas buenas fotos en mano, el próximo paso es redactar una descripción detallada y atractiva de tu casa, destacando sus mejores características y sus puntos fuertes.
A continuación, publica el anuncio de venta de tu casa en Mappi para lograr un mayor alcance de vistas.
Si trabajas con un agente inmobiliario, él contará además con una cartera de clientes más amplia.
Revisa y negocia las ofertas
Una vez que tu casa esté publicada, aparecerán los primeros compradores que querrán visitarla y, enseguida, llegarán las ofertas.
Cuando las recibas puedes aceptarla, rechazarla o hacer una contraoferta, pero siempre asegúrate de responder con rapidez. Las respuestas debes ofrecerlas por escrito y dar un plazo breve (por lo menos de 48 horas) para que el comprador responda.
Si llegas a tener varias ofertas a la vez, verifícalas con cuidado y no te enamores de la más alta. Toma en cuenta la forma de pago, el tipo de financiación y la fecha de cierre propuesta por el comprador.
Reúne la documentación y cierra la venta
Para cerrar la venta de tu casa necesitarás una serie de documentos, como el contrato de compra, papeles de la hipoteca, impuestos, seguros, entre otros. Finalmente, con los documentos (y con las llaves), cierra la venta. Una vez que todo esté firmado, ¡habrás vendido tu casa!
Recuerda que vender una casa es un proceso que lleva tiempo, así que necesitarás de toda la paciencia que puedas juntar. Además, deberás estar preparado para adaptarte a la situación del mercado inmobiliario.
Si sigues esta guía estarás en el camino correcto para vender tu casa al mejor precio.